El Acoso del Banco Pichincha

Quiero empezar con la definición del Diccionario de la Real Academia de la palabra acosar.

Acosar. Perseguir, apremiar, importunar a alguien con molestias o requerimientos.

Por cerca de 13 años mantengo una cuenta corriente en el Banco del Pichincha, debo decir que hace un par de años, empecé a recibir llamadas del mencionado banco, ofreciendo sus servicios, amablemente y con mucha paciencia, escuche a los vendedores del banco.

Un día decidí dejar de usar ese banco, a pesar de que mi cuenta se mantiene activa con un saldo mínimo. A continuación mis razones por las que no uso Banco Pichincha.

1. Valoro mucho mi tiempo, Banco Pichincha no hace lo mismo con sus clientes, para todos nos resultan familiares las largas filas en las cajas de banco Pichincha, para que usar un banco que no es sensible y valora a sus clientes.

2. Me llamaron en innumerables ocasiones a mi casa, celular, oficina para ofrecerme enciclopedias, cursos, etc, etc. vendedores a los que con amabilidad y respeto escuche y mencione no estar interesado en sus servicios.

3. Si por algún motivo usaba mi tarjeta de crédito Diners, inmediatamente después de hacer algún consumo, recibía llamadas ofreciendo ofertas en Hoteles, restaurantes, líneas aéreas, y hasta seguros de salud y similares. Todas estas llamadas las acepte, nuevamente con respeto, para los vendedores de la mencionada institución, relacionada también con el famoso banco.

4. Si por algún motivo incrementaba o disminuía mi saldo promedio en la institución bancaria, nuevamente un ejército de vendedores llamaba a ofrecerme créditos para solventar una emergencia o servicios de inversiones. Gracias pero no me interesa fue siempre mi respuesta después de escuchar amablemente.

5. Una de las razones para aceptar su tarjeta de crédito Diners, fue su revista del mismo nombre, a la que decidí suscribirme inmediatamente después de haber sido aceptado como tarjetahabiente. Hoy varios años más tarde y después de varios intentos, sólo puedo comentarles que aún no he recibido ninguno de esos ejemplares. Menos mal tampoco se me ha facturado.

6. Solicite una tarjeta adicional para entregársela a mi esposa, menos mal existen otras instituciones eficientes que en menos de lo que canta un gallo, aceptaron gustosamente entregarme la tarjeta adicional solicitada. Ahora cuando ya no la necesito, nuevamente el ejército de vendedores llama incansablemente a ofrecerme el mencionado servicio.

7. En un viaje al exterior, con mi tarjeta de cajero automático, ingresé erróneamente la clave, basta mencionarles que tuve que usar una tarjeta de otro banco, pues a pesar de las miles de explicaciones, los funcionarios del pichincha a los que llamé, seguían exigiendo que les envie un poder notariado para poder entregarme un nuevo plástico, pues el que tenía en mis manos había sido ya anulado.

8. Al banco se le ocurrió implementar la tarjeta de coordenadas, nuevamente me encontraba fuera del país y aunque había saldo en mi cuenta corriente, no podía pagar con ese dinero mi cuenta pendiente en la tarjeta, gracias a la SEGURIDAD del banco. 

9. Me han ofrecido su tarjeta de débito experta, Les dije que no gracias, el vendedor con insistencia me pedía que la acepte, que es gratis. No la necesito; la razón es que ya no guardo mis 4 centavos con ustedes, los guardo en un banco que me da un mejor servicio.

10. Al mismo vendedor del punto 9 , le solicite muy amablemente y de la manera más comedida, me eliminen de sus bases de datos, o que marque de alguna manera en su sistema, que el cliente no desea este servicio.Sorprendentemente hoy volvieron a llamarme, para ofrecerme exactamente el mismo servicio, y hasta podría jurar era la misma vendedora.

11. Me ofrecieron también la tarjeta Diners Club Advantage, la cual poseo, pero para seguir teniendo el beneficio de acumular millas, debía hacer un pago de 43 USD. Muy amablemente le explique al vendedor que no la deseo. LA RAZON: Otra entidad bancaria me acumula millas, con COSTO CERO.

12. Al caducar mi tarjeta de crédito, se demoraron 5 meses en entregarme el plástico de reemplazo.

13. Me llaman con gran insistencia a ofrecerme el crédito pre aprobado que Banco Pichincha tiene para mi. Estoy seguro que el momento que lo necesite, probablemente me lo negaran. Por lo pronto no lo necesito, por favor entiendanlo.

Mi cuenta en el Pichincha tiene un valor sentimental muy grande; lastimosamente ustedes se empeñan en que la cierre. Dejen de acosarme, les aseguro que si necesito uno de sus servicios acudiré a alguna de sus agencias, eso sí, después de haber recorrido todos los otros bancos y agotado todas las alternativas.


Alfred Naranjo Cobo